Los nuevos escenarios globales, en particular de CVC, definen un cambio en la forma de diseñar a todas las escalas que implica, entre otros aspectos, incorporar la toma de decisiones en entornos de incertidumbre.
Partiendo por explicitar el enfoque conceptual de adaptación al CVC, este capítulo desarrolla la mirada desde tres sistemas sectoriales (bioclimatismo, aguas pluviales urbanas y arbolado urbano) que se articulan en una estrategia proyectual de abordaje integral, aplicada a distintos tipos urbanos.
El enfoque de bioclimatismo aporta evidencias desde la evaluación con herramientas de simulación
energético-ambiental en escenarios climáticos actuales y futuros. Se caracterizan microclimas urbanos para detectar fenómenos de isla de calor urbana. Se evalúa la perspectiva de confort térmico en espacios públicos visibilizando impactos del diseño en aspectos sanitarios. Se analiza la efectividad de estrategias bioclimáticas en espacios públicos y edificaciones, demostrando el enorme potencial del diseño pasivo.
Se evalúa asimismo la incorporación de estrategias y dispositivos en edificaciones, comprobando notables mejoras en la eficiencia energética de las edificaciones y el confort térmico de los usuarios.
En relación al drenaje pluvial urbano, el capítulo aporta elementos conceptuales para comprender el cambio de enfoque hacia un drenaje urbano sostenible. Este cambio de enfoque conlleva construir una nueva mirada holística con una activa participación de los campos disciplinares relacionados a la planificación y al diseño urbano. En este sentido, se aportan elementos para integrar la planificación de la ciudad a la planificación de las aguas y algunas cuestiones relevantes asociadas a la incorporación de la gestión de las aguas a la práctica proyectual del arquitecto.
El arbolado urbano se enfoca como dispositivo componente de la infraestructura verde, que contribuye a las soluciones de los problemas vinculados a microclima y drenaje urbano. Se profundiza específicamente en el arbolado de alineación en el espacio público. Se realiza una sistematización que se apoya en la descripción del ejemplar arbóreo, su fenotipo, los requerimientos para su desarrollo en condiciones saludables en la ciudad (sol, agua y suelo), la tolerancia al viento, a la salinidad y a la contaminación del aire y una sistematización de especies sustentada en las posibles colaboraciones o funciones del árbol vinculadas a los servicios ecosistémicos de regulación climática. Se trabaja sobre los atributos de los tipos urbanos que definen características, restricciones y condiciones de implantación del dispositivo y se ensayan una serie de recomendaciones que colaboran en la selección de alternativas de diseño.
La estrategia de abordaje integral propone entender la ciudad a través de un enfoque sistémico, generando cambios en los mecanismos de actuación, a partir de un diseño resiliente que considere los riesgos climáticos actuales y futuros. La definición de una caja de herramientas proyectual, permite su aplicación demostrativa a distintos casos representativos de tipos urbanos, obteniendo estrategias y alternativas de adaptación al CVC, que se explicitan desde la mirada de cobeneficios y beneficios múltiples.
